A medida que se realizan más cosas y operaciones en línea, la seguridad y la concienciación sobre Internet aumentan día a día. La gente busca continuamente formas de protegerse de un sinfín de amenazas, riesgos y peligros relacionados con la Red.
Las cifras son alarmantes: más de dos tercios de la población estadounidense han sido víctimas de algún tipo de piratería informática o ciberataque.
¿Qué es la seguridad en Internet?
Es el conglomerado de términos, situaciones y recomendaciones para la seguridad y la concienciación al utilizar la web. Es un tema amplio que abarca aspectos como la seguridad de los navegadores, las transacciones, la seguridad de los datos, la privacidad, la seguridad del correo electrónico, los métodos de autenticación, la gestión de contraseñas, etc.
A medida que los hackersatacan y causan daños (a veces irreparables), aumenta la concienciación de particulares, empresas, organizaciones y gobiernos, y la seguridad en Internet se convierte en una prioridad. Proteger las transacciones, la información, los datos y los archivos en línea se ha convertido en una cuestión muy delicada.
He aquí algunas amenazas notorias asociadas al mundo en línea:
Software malicioso: Puede definirse como cualquier software que interrumpe o altera el funcionamiento de un ordenador o dispositivo. En numerosas ocasiones, el usuario es engañado para que haga clic, descargue o acceda a enlaces sospechosos que contienen algún tipo de virus, troyano, spyware o gusano. Algunos ejemplos o tipos de software malicioso son:
- Virus; programas que infectan otros archivos o estructuras de un ordenador para robar datos.
- Gusanos; programas replicables que realizan tareas maliciosas en una red.
- Ransomware; un programa malicioso que "secuestra" un ordenador o dispositivo y amenaza con borrar, bloquear permanentemente o publicar información a menos que se pague un "rescate".
- Spyware; software que espía la actividad de un usuario concreto para comunicar la información a un tercero sin su consentimiento.
- Troyano; un software aparentemente inofensivo que los usuarios descargan sin conocer las posibles consecuencias.
Ataques de denegación de servicio: Conocidos como ataques DDoS, son técnicas turbias que implican intentos de "tumbar" un servidor con el flujo de tráfico redirigido a propósito que sobrecarga el sistema. La intención es hacer que una determinada oferta o servicio no esté disponible.
Phishing: Es un ataque en el que los hackers se hacen pasar por una entidad o empresa conocida para engañar a los usuarios y conseguir que faciliten información personal o financiera para utilizarla en su propio beneficio.
Smishing: Es lo mismo que el phishing, pero realizado a través de SMS (SMiShing.)
Recomendaciones de seguridad en Internet
Gestión inteligente de contraseñas
Si los hackers se encuentran ante contraseñas extremadamente básicas y sencillas como "123456", "abc123;" o tu nombre o cumpleaños, el trabajo les resultará mucho más fácil. ¡Al menos oponga resistencia!
Los usuarios deben diversificar su catálogo de contraseñas, especialmente para actividades sensibles como la banca y las compras en línea. Prueba a mezclar letras, números y caracteres especiales como puntos, comas, asteriscos y signos de exclamación.
La creatividad también es recomendable. Intenta idear cosas que nadie adivinaría, aunque realice cien intentos.
Autenticación multifactor
Algunas de las mayores y más reconocidas redes y empresas en línea están aplicando este método. Consiste en pedir al usuario más de un requisito para entrar en su cuenta. Suele tratarse de un código enviado a su servicio telefónico, además de la contraseña ya exigida.
Sé responsable de lo que revelas al mundo
Todo empieza por uno mismo. Ten cuidado con lo que compartes en tus cuentas de redes sociales: son herramientas excelentes para interactuar con la comunidad, pero también son los lugares favoritos de los hackers para recabar información sobre posibles víctimas.
Intente evitar hacer públicos detalles concretos sobre usted, como su dirección, su cuenta de correo electrónico y sus datos bancarios, por inofensivos que parezcan.
Dar prioridad a HTTPS
El Protocolo de Transferencia de Hipertexto (HTTP) permite acceder a las numerosas páginas y sitios de la Red. Sin embargo, el Protocolo de Transferencia de Hipertexto Seguro (HTTPS) es mucho más seguro, ya que la comunicación entre el usuario y la página está cifrada.
Los usuarios dan prioridad a los sitios HTTPS para compartir e intercambiar datos con sensatez. Puede comprobar el HTTPS en la barra de direcciones con el símbolo de un candado.
No reveles tu ubicación
Numerosos viajeros comparten su ubicación actual en las redes sociales como forma de relacionarse e interactuar con sus amigos o seguidores. Sin embargo, los ciberdelincuentes se están enterando de que no estás en casa y pueden planear entrar sin que te des cuenta hasta que vuelvas.
Además, cada vez es más importante no dejar el ordenador solo, sobre todo si se está de viaje. Podría ocurrir que alguien se abalanzara sobre él y robara datos sensibles.
Evite las redes Wi-Fi públicas
Ir a una cafetería o a una biblioteca y disponer de Wi-Fi gratuito puede ser una bendición. Sin embargo, ten mucho cuidado, ya que también puede ser un dolor: hay numerosos hackers al acecho alrededor de los puntos de acceso públicos, y están listos para atacar y victimizar a los usuarios desprevenidos.
Utilizar una VPN
Las redes privadas virtuales (VPN) son herramientas de encriptación que desvían el tráfico del usuario y lo envían a servidores remotos gestionados por la empresa VPN o el proveedor de servicios. El objetivo es mantener la información encriptada para defenderse de piratas informáticos, agencias gubernamentales de vigilancia, anunciantes en línea y otras miradas indiscretas en la Red.
Sin embargo, como pueden hacer anónimos a los usuarios y a menudo vienen con funciones antispyware o antimalware, las VPN son herramientas perfectas para la seguridad en Internet.