La privacidad en línea puede salir cara cuando no se protege. Así lo demuestran las recientes violaciones de la privacidad y la seguridad. Proteger la privacidad en línea puede ser una tarea difícil, ya que la privacidad es una entidad muy amplia e implica ocuparse también de cuestiones de seguridad en Internet. Pero no se preocupe, en este artículo le mostraremos algunas listas de comprobación básicas que garantizarán que su privacidad esté protegida en todo momento.
¿Qué es la privacidad en línea?
Privacidad en línea/privacidad digital puede definirse como el mantenimiento de información sensible sobre uno mismo (identidad) en Internet. La privacidad en línea implica muchas entidades que pueden clasificarse como información de identificación personal, como el nombre completo, la dirección, etc., y también información de identificación no personal, como el comportamiento de una persona cuando navega por un sitio concreto.
A continuación encontrará una guía para principiantes sobre la privacidad en Internet.
Gestión de contraseñas
Casi todo lo que hacemos en Internet empieza probablemente con un proceso de registro, y esto implica contraseñas. La protección de la privacidad en línea comienza con una gestión adecuada de las contraseñas. Una mala gestión de contraseñas dará lugar a una brecha, y su privacidad estará en peligro. La gestión de contraseñas implica el arte de crear contraseñas seguras, mantenerlas a salvo, borrarlas o cambiarlas con regularidad. Como regla general, las contraseñas seguras tienen varios caracteres como números, letras, símbolos especiales y deben tener entre ocho y 12 caracteres y ser tan largas como te plazca, además de impredecibles. Esto es puro estrés, pero con los generadores de contraseñas todo es coser y cantar. También es aconsejable utilizar contraseñas diferentes para distintas cuentas en línea para minimizar el riesgo de exponerlas cuando una sola cuenta sea violada. Para evitarte el engorro de atiborrarte de contraseñas largas que al final olvidarás, utiliza un gestor de contraseñas de confianza.
Navegación segura
Para acceder/navegar por la mayor parte de Internet, necesitarás un navegador web. Los navegadores más populares son Chrome, Edge, Mozilla Firefox y Safari. Estos navegadores se pueden hacer seguros, ya que son vulnerables y pueden filtrar su privacidad en su estado predeterminado. Para mejorar la seguridad de un navegador, primero debes optimizar algunos de sus ajustes. Los ajustes más comunes se refieren a las cookies. Elige siempre conservar las cookies hasta que termine la sesión si eliminarlas puede afectar a tu experiencia de navegación. Otra cosa que debes hacer es bloquear los anuncios, las ventanas emergentes, JavaScript e incluso Flash. Por último, desactiva las opciones de autocompletar y guardar contraseñas, así como el rastreo. También puedes optar por utilizar navegadores más respetuosos con la privacidad.
Mensajería segura
Internet abrió muchas posibilidades, y una de ellas es la mensajería online. La mensajería en línea se ha popularizado porque es barata y sus aplicaciones funcionan en todas las plataformas. En los casos en que las aplicaciones no son aplicables, intervienen los navegadores web. La mensajería en línea contiene la forma bruta de nuestra privacidad; lo que nos decimos puede incluir información sensible que no queremos que vean ojos indiscretos. Para garantizar una mensajería segura, asegúrate de que las aplicaciones o plataformas que utilizas tienen un cifrado de extremo a extremo.
Ajuste su sistema operativo
Algunos sistemas operativos como Windows 10 pueden suponer un riesgo para la privacidad si no se configuran correctamente. Esto se debe a que tienen un identificador de publicidad que permiten utilizar a las aplicaciones, los asistentes digitales integrados recopilan tus datos y también hay muchos acuerdos que puede que hayas comprobado que permiten al sistema operativo recopilar datos personales.
Utilizar una VPN
Una red privada virtual (VPN ) es una herramienta que garantiza la protección de todo el tráfico de Internet mediante el uso de cifrado. Esto significa que tu tráfico de Internet no sólo es seguro, sino que también está a salvo de miradas indiscretas y, por tanto, es privado. Una vez que te hayas ocupado de todo lo anterior, el último paso es utilizar una VP N siempre que quieras conectarte a Internet.