La privacidad es una de las mejores cosas que se pueden desear en esta era moderna. Pero también están las redes sociales y ese afán por compartir publicaciones y actualizaciones de lo que ocurre en tu vida. Pues bien, no es buena idea documentar tu vida en las redes sociales, ya que eso no va bien con la privacidad. La mayoría de las veces no te preocuparás, ya que los actores maliciosos suelen atacar a personas de alto perfil. Pero cuando lanzan su red, puede ser tu día de mala suerte. Y puesto que las personas de alto perfil pueden estar utilizando sofisticados mecanismos de seguridad, los actores maliciosos pueden optar por ir a por objetivos fáciles, y ahí es donde empezarán tus problemas.
Además de los actores maliciosos, la mayoría de las empresas necesitan tus datos para llevar a cabo sus negocios. Con potentes herramientas de extracción de datos, su información de las redes sociales puede utilizarse para dirigirle anuncios intrusivos. También se pueden dirigir a ti con diversas estafas.
Para evitar toda esa desafortunada serie de acontecimientos, he aquí algunos tipos de información con los que debes tener cuidado al compartir en las redes sociales;
Información personal identificable (IPI)
Se trata de cualquier información que pueda utilizarse para identificar o relacionar a una persona concreta. Las redes sociales se crearon para conectar a la gente, pero hoy en día son mucho más que eso. Es un lugar al que puedes ir y recopilar mucha información si eres un actor malicioso.
Mucha gente publica información personal que ni siquiera es obligatoria en las redes sociales. Por ejemplo, ¿por qué utilizar todos tus nombres en las redes sociales, o decirle a la gente tu número de la seguridad social, o sobre tu puesto de trabajo en una determinada empresa, o el nombre de tus hijos? Si es necesario actualizar esta información en tu perfil, al menos asegúrate de que sólo sea visible para ti y no para la gente en toda la línea de tiempo. Como regla general, nunca debes publicar/compartir información personal que pueda vincularse a ti específicamente.
Fotografías
Hoy en día, los smartphones incorporan cámaras potentes con la capacidad de las cámaras DSLR. Esto significa que puedes hacer fotos más claras y de alta calidad con muchos megapíxeles. El siguiente paso después de hacer una foto increíble es, por supuesto, compartirla con el mundo a través de las redes sociales. Pues bien, a partir de hoy, si haces una foto y quieres publicarla en las redes sociales, asegúrate de haber enfocado el elemento que quieres publicar. Con la incorporación del modo retrato con efecto bokeh (desenfoque del fondo), todo será más fácil.
Las fotos se convierten en un riesgo para la privacidad cuando muestran otras cosas de fondo. Es decir, puedes hacer una foto de un bonito jarrón que acabas de comprar en Internet, pero al lado está tu carné de conducir, o tu tarjeta de crédito y otras cosas que pueden servir para identificarte. Si no puedes recortar lo que no quieres, utiliza emojis para cubrir los detalles que no deberían estar en las redes sociales.
Tu ubicación
La ubicación es una información muy vital que no debe compartirse en las redes sociales a menos que sea necesario. Además de tu privacidad, compartir tu ubicación física puede causar daños físicos. Por ejemplo, si publicas o etiquetas tus fotos/post diciendo que estás de vacaciones, los malintencionados de tu barrio pueden entrar en tu casa y robarte lo que quieran. Si quieres publicar las fotos de tus dulces vacaciones, hazlo cuando estés a salvo en casa.
Además, desactiva siempre el geoetiquetado, ya que este servicio revela tu ubicación. Además, revisa tu configuración de etiquetado, ya que tus compañeros de vacaciones podrían etiquetarte en sus fotos, y eso puede suponer un riesgo para tu privacidad.
Utilizar una VPN - IPBurger VPN
Una VPN es necesaria para proteger tu conexión a Internet, especialmente cuando accedes a tus cuentas de redes sociales desde una red Wi-Fi pública no segura. Las redes Wi-Fi públicas son un centro neurálgico para personas malintencionadas que, mediante diversas técnicas como la escucha clandestina y los ataques de intermediario, pueden hacerse fácilmente con tu nombre de usuario y tus contraseñas interceptando tu tráfico de Internet. Cuando se utiliza una VPN, el tráfico de Internet se cifra y se canaliza a través de servidores seguros. Esto dificulta que los actores maliciosos intercepten su tráfico de Internet y accedan a sus cuentas.